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Mini Historia nº2: Diario de Kobymeppo

Contexto

Mini Historia nº2: Diario de Kobymeppo

Portadas de los capítulos (083-119)

Después de la derrota de Morgan a manos de Luffy, Koby y Helmeppo sufren un duro descenso en la jerarquía de la Marina, siendo degradados al rango más bajo, el de Zatsuyo (aprendices). A partir de este momento, sus vidas toman rumbos muy distintos: mientras Koby se llena de orgullo realizando tareas humildes —lavar ropa, cocinar y limpiar cañones— y dedica su tiempo libre a estudiar para convertirse en un gran Marine, Helmeppo desprecia estas labores, utilizándolas únicamente para descansar y maldecir a Luffy.

El curso de los acontecimientos se complica cuando el barco del Vicealmirante Garp llega con la misión de escoltar al ex capitán Morgan hasta prisión. La tensión se dispara al ver a Helmeppo, que se opone a la idea de ver a su padre arrestado. Aprovechando un descuido en el que Garp se queda dormido, Morgan toma a su hijo prisionero y huye en un pequeño barco, mientras los Marines se preparan para abrir fuego y evitar su escape. En un acto de nerviosismo y compasión, Koby interviene para impedir que disparen, con la esperanza de salvar a Helmeppo, pero es rápidamente contenido por un asistente que, junto a un Garp ya despierto, evita que se lance el cañón.

La situación se agrava cuando, en el barco de Morgan, Helmeppo se rebela contra su propio padre, provocando una confrontación que deja a él y a Koby en clara desventaja y facilita la huida de Morgan. Con el escape consumado, Garp, consciente de su negligencia y del caos generado, decide tomar una decisión crucial: en lugar de castigarlos, asume la responsabilidad de lo ocurrido y ofrece a Koby y Helmeppo la oportunidad de redimirse, integrándolos en los cuarteles de la Marina como sus nuevos aprendices.

Ya en la base, los dos jóvenes no pierden tiempo y se dedican con empeño a entrenar para fortalecerse y prepararse para futuros desafíos. Paralelamente, en Shells Town, la noticia de su partida causa sentimientos encontrados, especialmente en Rika, quien se muestra afectada por la despedida. La minihistoria culmina con un Garp optimista y sonriente, observando con satisfacción el comienzo del arduo camino de sus nuevos discípulos, marcando el inicio de su transformación y crecimiento dentro de la Marina.